Madre de la Salvación: Recuerda que Satanás desprecia esta Misión, porque perderá miles de millones de almas a causa de ella.

Mis queridos hijos, no dejéis que el odio de esta Misión perturbe vuestros corazones. Por el contrario, inclinen sus cabezas en acción de gracias por el Regalo del Libro de la Verdad, en estos tiempos problemáticos en la Tierra.

Mi amado Hijo, Jesucristo, fue atormentado, despreciado y reprendido durante Su Misión de predicar la Verdad, durante Su Tiempo en la Tierra. Aquellos que conocían la Palabra de Dios se negaron a reconocer al Mesías prometido, cuando Él se presentó ante ellos. Sus Palabras fueron despedazadas, pero a pesar de esto, no fueron ignoradas. Cuando Dios habla a través de Sus profetas, y en el caso de mi Hijo - el Verdadero Mesías - es imposible para el hombre ignorar la Palabra. Aquellos que no aceptan la Palabra de Dios, cuando brota de la boca de los profetas, encontrarán imposible darles la espalda. Por el contrario, su odio les atormentará y ni un momento de paz sentirán en sus corazones.

Durante la Crucifixión de mi Hijo Él fue brutalizado y torturado, con una crueldad perversa, que aquellos que fueron crucificados con Él en el mismo día no tuvieron que soportar. Sin embargo, ellos eran criminales convictos y el único crimen de mi Hijo fue que dijo la Verdad. Cuando la Verdad - la Palabra de Dios - es dicha a través de los profetas es como una espada de doble filo. Traerá alegría y gracias especiales a algunos, pero a otros les traerá miedo, lo que puede causar odio. Así que cuando veáis odio en forma de actos perversos, mentiras y la tergiversación deliberada de la Palabra, sabed que esta Misión viene de Dios. Los muchos falsos profetas, que deambulan por la Tierra en este tiempo, no provocan tal reacción, porque no vienen de Dios.

Recuerda que Satanás desprecia esta Misión, porque perderá miles de millones de almas a causa de ella. Por lo tanto, será un camino muy difícil para los que la sigan. Os exhorto a que estéis atentos a los que dicen que vienen en Nombre de mi Hijo y luego declaran que ésta, la Palabra de Dios, viene de Satanás. Cometen uno de los errores más graves de blasfemia contra el Espíritu Santo. Rezad, rezad, rezad por esas pobres almas. No sientas ira por ellas. Por el contrario, debes suplicar Misericordia para sus almas.

Para salvaguardar esta Misión, contra la maldad de Satanás, les pido que comiencen a recitar esta poderosa Oración para renunciar a Satanás. Cuando recites esta Oración de Cruzada, al menos dos veces por semana, ayudarás a proteger esta Misión de Salvación y traerás más almas al Reino de Dios.

Oración de Cruzada (132) Renuncia a Satanás, para proteger esta Misión

Oh Madre de la Salvación, ven en ayuda de esta Misión. Ayúdanos, Ejército Remanente de Dios, a renunciar a Satanás. Te suplicamos que aplastes la cabeza de la bestia con tu talón y elimines todos los obstáculos en nuestra Misión de salvar almas. Amén.

Hijos, debéis recordar que nunca es fácil cuando ayudáis a mi Hijo a llevar Su Cruz. Su sufrimiento se convierte en el vuestro, cuando declaráis vuestra lealtad a Él. Confiando plenamente en Él y perseverando en vuestro camino para ayudarle a salvar almas, os haréis más fuertes. Se os dará el valor, la fuerza y la dignidad para elevaros por encima del ridículo, la blasfemia y las tentaciones, que serán vuestra suerte diaria, hasta el Día de la Segunda Venida de mi amado Hijo, Jesucristo.

Id en paz. Pon toda tu confianza en mi Hijo e invócame siempre a mí, tu amada Madre de la Salvación, para que venga en tu ayuda en tu Misión de promover la salvación de las almas.

Tu querida Madre

Madre de la Salvación